Preguntas y respuestas

Si tú o alguien que tú conoces sufrió una agresión sexual y sospecha que está embarazada, lo que se debe hacer es:

1. Presenta la denuncia de violación ante la Policía, Fiscalía o instancias pertinentes para la investigación de la agresión sexual, no te olvides solicitar una copia de la denuncia.
2. Acude a un centro público o privado de salud y solicita la Interrupción legal del embarazo, mostrando la copia de la denuncia realizada.

La sentencia 206/2014 del Tribunal Constitucional Plurinacional, indica que debes cumplir dos requisitos:

1. Una copia de la denuncia de violación.
2. Tu consentimiento. La única persona que debe decidir si desea o no interrumpir su embarazo, eres tú, nadie, ni siquiera tu pareja, tu familia o la familia de tu pareja, puede obligarte a abortar si no deseas hacerlo.

Si tu chico ha despertado temor en ti cuando se enoja, estás viviendo una relación violenta. Los insultos y golpes constituyen violencia física y psicológica. El artículo 45 de la Ley 348, establece una seria de medidas de protección para

que tu chico no se acerque más a ti ni a ti familia. Lo importante es que denuncies a tiempo para parar la situación y tú puedas recibir apoyo psicológico necesario.

Si terminaste con tu chico y su pandilla te amenaza a ti o a tu familia, es señal de peligro. Debes contactarte inmediatamente con alguna persona de confianza y autoridad para detener a tiempo algún hecho de violencia o amedrentamiento por parte de la pandilla.

El Código Penal, en su art. 293, sanciona a quien amenace o amedrente a otra persona. Y si la pandilla te obliga a hacer o no hacer algo, ellos/as pueden ir a la cárcel.

Es importante que sepas que la difusión de material íntimo por medio del internet es una violación a tu privacidad. Existen varias leyes que te protegen, tú puedes pedir protección, también el Código Penal, art. 322 sanciona a toda persona que reproduzca y distribuya material pornográfico. Y si tu chico te extorsiona o amenaza, ya ha publicado fotos tuyas, puedes denunciarlo, ante la

Defensoría de la niñez, Fiscalía y/o Policía. Él o ella serán sancionados por la ley.

Si estás en estado de ebriedad y una o varias personas han tocado tus partes íntimas (pene, vagina o ano) o sospechas que te han violado, no es tu culpa bajo ninguna circunstancia.

La agresión sexual no se provoca con la forma de vestir, con la forma de actuar o si bebiste alcohol o hayas iniciado una relación sexual con esta persona, pero te arrepentiste a último momento y te forzaron a hacerlo. NO es tu culpa. No pediste que esto suceda y no lo mereces. Toda relación sexual forzada y sin consentimiento pleno es considerada una violación y sancionada con cárcel para los agresores. Cuéntale lo sucedido a una persona de confianza para que te apoye en el proceso de denuncia y si no es posible puedes denunciar sola en la Defensoría o FELCV lo antes posible para que las autoridades tomen acciones contra los agresores sexuales.

Debes frenar la situación, lo que ellos están haciendo se llama abuso sexual.

Avisa lo que está sucediendo a una persona de confianza para que te ayude a frenar la situación.

No te expongas a situaciones de riesgo. Cuando algunas personas están con los efectos del alcohol y no tiene control sobre sus acciones, lo mejor es salir del lugar y alejarte de esas personas. Está en tus manos prevenir la situación. El abuso del alcohol muchas veces es pretexto para decir que no se recuerdan de algo o para desligarse de sus responsabilidades.

A esto se llama chantaje emocional.  Es una forma de violencia. Debes conversar con ella para que entienda tu decisión. Comenta el problema con una amiga, un profesor/a. Cada persona es responsable de las decisiones que toma sobre su vida, tú no tienes la culpa, ni eres responsable de las decisiones de los demás.

Te damos algunos consejos:

1. Reconoce los momentos o situaciones que te llevan a comportarte agresiva.
2. En ese momento, pide a tu pareja que se tomen un tiempo para pensar y espera a que estés más tranquila.
3. Comunícate asertivamente y explícale el porqué de tu enojo Ej.: Cuando tú haces/dices… yo me siento… me gustaría que…

Si deseas ayuda, puedes acudir a nuestro Centro de Salud IpDH, para hablar con una persona que te apoyará.