Con mis amigos vimos videos porno. Desde entonces, cuando estoy con mi amiga, no paro de pensar en eso, me siento muy incómodo. Me gustaría no haberlos visto. ¡Ayuda!!!

Debes saber que lo que viste no es real, la pornografía siempre muestra imágenes sobredimensionadas, ahora que sabes eso, cuando estés con tu amiga, trata de pensar en otras cosas, aprovecha para conocerla mejor, hablen de intereses comunes.

Las imágenes que viste pueden haberte chocado, habla con una persona de confianza sobre lo que ocurrió, trata de no guardártelo para ti.

En la adolescencia, puede que tengas muchas dudas sobre cómo tener relaciones sexuales, pero buscar en la pornografía no es la solución. Trata de construir tu propia visión de la sexualidad, a partir de tus propias experiencias y no a partir de videos que te hacen sentir mal.

Toma distancia de estos contenidos, porque cuanto más los consumas, más te acostumbrarás a lo que ves, hasta que lo consideres normal. Incluso hay jóvenes que desarrollan adicción a la pornografía, ten cuidado.

Estoy transpirando demasiado, me molesta mucho porque siento que huelo mal. ¿Qué puedo hacer?

Tranquilo, la transpiración en la adolescencia es normal. Se debe a que en la pubertad las hormonas afectan las glándulas de la piel y esas producen sustancias químicas que tienen mal olor.

Está bien que te preocupes de tu olor, te damos algunos tips:

–           Date duchas diarias

–           Llévate en tu mochila desodorante y una polera para cambiarte

–           Limpia cada semana tus tenis

–           Cambia de calcetines cada día

¿Sabes qué es el flujo vaginal? ¿es bueno o malo?

sí, esas manchas blancas en tu ropa interior son totalmente normales

Pueden ser blancas, amarillas, marrones, grises o incluso verdes. Y a algunas mujeres les molestan. Pero, ¿sabías que en realidad esas manchas son las huellas de tu propio escudo protector? Se llama «flora vaginal». ¡Incluso protege contra diversas infecciones!

¿Qué debo hacer si tengo la viruela del simio?

Ponerte en contacto con un médico para el diagnóstico y seguimiento hasta tu
recuperación, utilizar mascarilla o barbijo, lavarte las manos o desinfectarlas,
aislarte (si es posible) en un cuarto ventilado, mantén las lesiones limpias y
secas hasta que se caigan las costras y no haya lesiones en la piel y que tu
médico te dé el alta, no compartas toallas, ropa o sábanas, toma mucho
líquido, come bien y descansa. En el Centro de Salud IpDH, contamos con
médicos que te pueden ayudar.

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