Si estás en estado de ebriedad y una o varias personas han tocado tus partes íntimas (pene, vagina o ano) o sospechas que te han violado, no es tu culpa bajo ninguna circunstancia.

La agresión sexual no se provoca con la forma de vestir, con la forma de actuar o si bebiste alcohol o hayas iniciado una relación sexual con esta persona, pero te arrepentiste a último momento y te forzaron a hacerlo. NO es tu culpa. No pediste que esto suceda y no lo mereces. Toda relación sexual forzada y sin consentimiento pleno es considerada una violación y sancionada con cárcel para los agresores. Cuéntale lo sucedido a una persona de confianza para que te apoye en el proceso de denuncia y si no es posible puedes denunciar sola en la Defensoría o FELCV lo antes posible para que las autoridades tomen acciones contra los agresores sexuales.

Siguenos en:

© 2023 – Instituto para el Desarrollo Humano – Bolivia

Verificado por MonsterInsights